Ulises, al comando de la nave espacial Odiseus, destruye al gran Cíclope y rescata a un grupo de niños prisioneros incluyendo a su propio hijo Telémaco, despertando así la ira de los dioses. El dios Poseidón pide ayuda a Zeus para que sentencie a Ulises a vagar por el universo del Olimpo y congele a su tripulación, que permanece hibernada en la nave hasta que pueda encontrar el reino de Hades, tras lo que le será permitido volver a la Tierra.